domingo, 8 de marzo de 2009

Argumento No. 1'932: Conquistar a una mujer que no existe sin herirla en el proceso


Recuerdo la primera vez que te encontré en la calle mientras caminabas de regreso a casa. Yo te miré, pero tal vez tu no me viste a mí. En la calle no había nada ni nadie más que nosotros dos, aunque tu ibas unos pasos adelante de mí. Creo que aunque no me viste, supiste que yo estaba allí y creíste que era un criminal a punto de asaltarte. Me imagino que tu corazón empezó a palpitar rápidamente, lo cual me habría dado mucho gusto, pero en diferentes circunstancias.

Diste vuelta en una esquina y te perdí de vista entre los árboles y un par de señores que lavaban su auto. Bien pude haberte seguido, pero entonces por seguirte habría terminado en cualquier lugar, menos en mi casa. Esa noche suspiré una y otra vez. Siempre me pasa.

Al día siguiente caminé por el mismo lugar, el cual era todo, menos un atajo, y en el cual esperaba encontrarte otra vez, y esta vez sería para preguntarte por lo menos tu nombre. Caminé, cuidando de que el reloj marcara la misma hora del día anterior, justo cuando te miré por primera ocasión.

No apareciste ni ese día, ni el siguiente. Ni en un mes ni dos, y quizás hasta un año pasó.

Entonces porqué cuento esta historia y digo que fue 'la primera vez' que te ví, si se supone que sólo te he visto en esa ocasión?

Quizás, en mi afán por inventarte, imaginé algo que nunca existió en verdad.

Te imaginé a tí.

2 comentarios:

Miss Vintage dijo...

ayyyyyyyyyyyyy que tristeeeeee
=´(

Anónimo dijo...

Pues la neta, creo ke a mi tmbn me ha pasado esoo, ya somos 2 con paranoia, jajaja

Muy buena, me llego la verdad..