martes, 27 de enero de 2009

El Rock

Bien, seré breve.

No he vuelto a opinar del Rock Laguense actual, porque sencillamente para mí no existe. A Muchos les podrá gustar ese tipo de "Música" que ronda en uno que otro lugarcito afresado de por ahí, pero a mi no.

Quienes me conocen bien saben que el rock Mexicano actual en general tampoco me gusta para nada.

Si algún día me topo con alguna banda que por el amor de Dios no sea Indie, Emo, instrumental, Post-rock, Metal o "géneros" por el estilo, seguro escribiré acerca de ella.

Yo no soy crítico musical ni me interesa. Tampoco voy a escribir sobre algo que no me gusta escuchar.

Fue divertido escribir sobre la Cereza Polar. Me pareció interesante. Los mismos Cerezos saben que nunca me entrevisté con ellos para escribir los artículos.

El Rock Laguense (para mí) lleva un buen tiempo muerto.

(Para mi) No existe y ya.


lunes, 26 de enero de 2009

Yo nunca entendí a las esquinas...


...Porque en parte, las esquinas nunca han tratado de entenderme a mí.

El otro día alguien me pregunto mi opinión acerca de las esquinas. Yo le dije, sin pensarlo siquiera un segundo, que las esquinas me producen un efecto anestésico que hace que me relaje y pierda todo interés por salirme de allí. Usualmente, las esquinas de mi casa están siempre ocupadas con algún adorno o mueble, por eso, el hecho de encontrar una esquina desnuda me brinda una sensación de paz y regocijo interno.

Cuando uno va a una esquina, regularmente siempre va solo. Es más divertido, sin embargo, ir a una esquina, solo, y a oscuras. Cuando era niño me divertía mucho ir a una esquina cuando no había luz alguna en el cuarto. Pensaba "en cualquier momento aparecerá un mounstro y probablemente me haré uno de ellos". Luego la idea fue variando poco a poco hasta que me dí cuenta de que estar sentado en una esquina, solo y a oscuras, me provoca una risa incontenible y más o menos locuaz.

Es divertido. Son divertidas las esquinas. Observar vértices arquitectonicos como el de la fotografía de arriba hace que me sienta realizado como ser humano. Ojala fuera un Gecko y pudiera asirme a las paredes y vivir de cabeza. Bueno, vivir de cabeza también es divertido. Me imagino que vivir de cabeza en una esquina en el techo, solo, y a oscuras, debe ser tres veces más divertido todavía.

Siendo un Gecko, mi preocupación básica sería comer y después permanecer sujeto a una pared o techo o árbol. Insisto en el hecho de que nunca he entendido a las esquinas, porque no entiendo la necesidad de entenderlas. Para que querría alguien entender a una esquina?

Ojalá fuera un Gecko inteligente y comprensivo de las necesidades de una esquina.

Ojalá fuera un Gecko inteligente, viviendo de cabeza, sujeto a una esquina en el techo, solo y a oscuras.

Y ojalá hubiera moscas, muchas moscas.

martes, 20 de enero de 2009

Gotas


No he dejado de quejarme de la luna que se ve
reflejada entre los charcos de tu piel
y esa agua se derrama y se desliza en la pared
y se mete como gotas a mis ojos
y se esparce y se me pierde entre los pies

No he pensado en los cuadernos de papel
acumulados en la esquina de mi cuarto
llevan tatuadas las palabras que grabé para tí
y se tiñen de un color amarillento
y los veo y me dan ganas de comerlos

No es para olvidarlos
no es para perderlos
es para sentir que los llevo adentro
es para sentir que te llevo adentro
para imaginar que soy yo
lo que ya no llevas dentro.

martes, 6 de enero de 2009

Me gusta caminar de noche, sobre todo si hay gatos agresivos y perros enamorados en el camino

(Fotografía de El Perro Bandido, que vive en mi casa, tiene 15 años y no tiene absolutamente nada que ver con el texto de abajo)

Una vez se me vino a la mente una frase por la cual me sentí orgulloso de mi ingenio y creatividad durante mas o menos una hora. "Las cosas adquieren otro tono cuando es de noche". Recité una y otra vez dicha frase en mi cabeza hasta que sinceramente me harté de ella y la mandé a la fregada, por considerarla plana y carente de imaginación. Pero sin embargo, siempre me gustó el tema que dicha frase tocaba: La Noche.

He de aceptar que siempre ocurre algo extraordinario cada que salgo por la noche. El hecho de verme a mí mismo caminando por una calle de por ahí, cuando ya la Luna hace acto de presencia y la iluminación del centro nos otorga una idea vaga del paradero del dinero que se invierte en la ciudad, es ya digno de recalcarse. Amo las noches, pero eso no necesariamente me convierte en un ser que ande de un sitio al otro en la búsqueda de desobedecer al plan maestro para el que fue creada la Noche: Dormir.

Una vez, no sé porqué razon aparecí yo en el centro de la ciudad, ya de noche. Estaba solo, pero no estaba desorientado, ni mareado, lo cual descartaba cualquier posible teoría de algun consumo de "alcohol". Después de todo, en este país los menores de edad no saben lo que es esa palabra que acabo de entrecomillar (sic). Creo firmemente que había acompañado a unos amigos a un sitio donde se llevaría a cabo un evento relacionado con el "arte" y la "cultura". La razón por la cual no permanecí en dicho sitio aún me resulta un tanto borrascosa. El chiste es que, despues de salir de dicho recinto "cultural", tomé la decisión de que lo mejor era pagarle al chofer de un camión urbano, para que con su vehículo funcional, ecológico y de envidiables condiciones, me diera un aventón a mi hogar, o por lo menos, a la calle donde éste se encuentra. El gran problema, es que dicha cuota era lo suficientemente alta como para no poder pagarla con mi presupuesto de 1 peso con 50 centavos.

Lo cual evidentemente se traducía en el hecho de tener que caminar hasta casa, de noche, solo.

Lo más bonito de caminar sin compañía por las calles de cualquier ciudad es que a cualquiera se le aparecen pensamientos paranoicos de la infancia en los cuales un ladron llega y nos asesina por culpa de un mugroso teléfono celular. Dichos pensamientos son tiernos porque, cuando somos niños, los adultos nos aterran con las leyendas urbanas mas variopintas. Por lo tanto, llegado el momento exacto, nuestros peores pensamientos se nos vienen a la mente, a veces por segundos, a veces por unos cuantos minutos, a veces por el resto de nuestras caminatas nocturnas.

O puede ser que a veces nunca nos pase realmente nada y es solamente un reflejo involuntario del cuerpo que se pone la reverenda chinga de producir más adrenalina con el único y bello fin de hacernos tropezar en el trayecto a casa. Yo, por ejemplo, tenía la ligera impresión de que alguien me venía persiguiendo, lo cual era verdad, pero dudo mucho que una señora de la tercera edad haya podido alcanzarme (puesto que yo ya llevaba un paso relativamente rápido) y en todo caso, de haberlo hecho, dudo que haya podido herirme mortalmente con un cuchillo cebollero, que aparentemente no llevaba consigo.

Curiosamente, mi madre siempre me había aconsejado que, llegado el momento, nunca caminara por las calles mas solitarias y con menos iluminación. Digo curiosamente, puesto que fue precisamente lo primero que no hice. Me fui por una calle solitaria y sin iluminación, pero que sin duda me dejaba mucho más cerca de mi casa que las calles "transitadas y luminosas". Lo mas peligroso que me encontré fue un par de gatos en celo que tenían todas las intenciones de herirme, y una pareja de perros que estaban felices y extasiados, copulando en un arbusto.

Sin duda la peor parte fue pasar por un puesto de tacos, pues el olor me estranguló el esófago y en mi conciencia rebotó una y otra vez la frase "no te hagas, tienes hambre y quieres tacos". No habría tenido problema alguno por dicho recital, pero sin embargo no traía más que 1 peso con 50 centavos en mi bolsillo, lo que me colocaba en un rango social increiblemente bajo.

Sobreviví a las hordas de estudiantes de secundaria, cuyas mentes tienen programadas un par de tareas: Desmadre & Joda. Es fácil, simplemente hay que ignorarlos y ya. Luego estuve cara a cara con las luces rojas de los "Bares" del boulevard, y la verdad no sé ni que diablos pensé en ese momento, porque me di cuenta de que si daba un paso más, un camión urbano (sí, el mismo que me habría podido llevar a casa si hubiese sido yo de la clase media) me arrollaría y terminaria cruelmente con mi corta vida.

Llegué a casa, me serví un plato de cereal y, por las expresiones de sus rostros, puedo suponer que mis padres no tenían la mínima idea de donde carajos había estado yo, y no les dí una explicación demasiado exacta. Nomás les dije que me vine por donde había luz, y que en el camino me tomé una Coca-Cola.

-No vas a dormir- dijo mi mamá con seguridad.

viernes, 2 de enero de 2009

Con Miedo al Miedo


-Sintió miedo Jesucristo cuando lo llevaban hasta el lugar de su crucifixión?
-Sintió miedo miedo Cuauhtemoc cuando le quemaban los pies?
-Sintió miedo Charles Manson cuando vió cómo sus súbditos cometían semejantes pendejadas?
-Siente miedo el presidente Calderón cuando ve por la televisión cómo ejecutan al pueblo por culpa de algo tan absurdo como las drogas (y no precisamente las drogas que se generan cuando uno compra algo que de entrada no puede pagar) y no puede hacer mucho al respecto?
-Siente miedo el Papa Benedicto XVI al ver cómo la gente cada vez tiene menos fé?
-Siente miedo el presidente de la Femexfut al ver cómo la gente cada vez se divierte menos con el futbol Mexicano?
-Siente miedo el Emo promedio al salir a la calle sabiendo que somos una sociedad llena de prejuicios?
-Sentimos miedo de llamarnos tercermundistas?
-Sentimos miedo de ser uno de los países mas corruptos del mundo?
-Sentirá miedo Saúl Hernandez cuando vea que sus discos cada vez se venden menos?
-Sentirán miedo los "liberales" y los "conservadores" de mi ciudad cuando alguien les diga que su pleito es demasiado infantil y ridículo como para ser tomado en serio?
-Sentirás miedo cuando alguien te diga que con tu ayuda, China se está colocando como una gran potencia en el mundo?
-Sentirán miedo las empresas, sabiendo que a final de cuentas, por más caros que estén, terminaremos comprando sus productos? Es que no podemos vivir sin cerveza, verdad?


Un consejo, preocupense por ustedes y por la gente que más quieren. Preocupense por hacer bien su trabajo y por amar a quien deben amar. Lo demás viene solito y sin pedirlo.

El video que sigue es de Bauhaus y la rola se titula "Dancing"
Creo que México como país está baile y baile XD

"Bailando en los azulejos calientes
Bailando en los ganchos blandos
Bailando abajo de los pasillos de la iglesia
Bailando en los libros sagrados
Bailando con cocodrilos
Bailando en la tierra santa
Bailando al estilo Nijinsky
Bailando con los perdidos y encontrados
"